miércoles, 22 de febrero de 2012

CAPÍTULO 2.


Empezó a andar. Le seguí. Nos dirigimos a la playa. Estaba preciosa, iluminada perfectamente. Un pequeño barquito estaba anclado en la orilla. Las olas del mar lo acariciaban.
W- mi sol…
Cat: ¿qué?
W- ¿Lees lo que pone en el barco?
Cat- mi sol…
W- Si, esa eres tú. Me dijo mientras me miraba intentando averiguar como reaccionaría.
Cat- ¿ Es tuyo ?
W-  Lo vi en el puerto, y se podía alquilar, asi que no lo pensé. Además ya tenía nombre, Mi Sol, justo lo que tú eres. Te miro a los ojos y lo puedo ver. Ese brillo de picardía y dulzura a la vez. Esas ganas de comerte el mundo. Todo eso se refleja en tus ojos. Es increíble. Es lo que más me gusta de ti. Brillas por ti sola, veo que tienes esa fuerza que dice de ti que siempre vas a seguir adelante.
Eso ultimo me asusto un poco “que siempre vas a seguir adelante”. Me dio la sensación de que con eso me quería decir algo. Una indirecta. Como esas películas en las que él dice una frase de ese estilo porque va a dejar a su pareja o porque tiene una enfermedad grave…
 Cat- Will, no voy a seguir adelante sin ti.
Me cogió ambas manos, me miro a los ojos.
W- Te quiero pequeña.
Madre mía, no podía ser mejor. Te quiero, esas dos palabras que significan tanto cuando de verdad se siente lo que se dice, con ellas se dice todo…
 El mar, la noche, la luna, un barco, mi sol, mi chico… El mejor que me podían dar, perfecto.
Cat- Y yo.- Quizás fui un poco sosa, lo sé. Pero Te Quiero…Uf, dos palabras que requieren valentía y por supuesto sentimientos.
Se echo a reír. Como cuando un mayor se ríe de una pequeña por su ingenuidad. Pero ya estaba segura. Esa noche me sentía, como decirlo…¿”mujer”?
Cat- ¿Qué pasa? Jajaja
W- Que yo te quiero mucho más.
Pegué mi frente con la suya. Rocé mi nariz con la suya. Reí, reí de felicidad como no lo había echo en todas mis vacaciones. El rió también y me besó. Dulce, tiernamente, con todo el amor del mundo. Me estrechó contra su pecho, le acaricié el pelo mientras me besaba. Y subimos así al barco. Riendo, jugando…
W- ¿Estás preparada?- preguntó con una sonrisa de oreja a oreja
Cat- ¿Para qué?- pregunte intimidada
W- Pues para darnos un chapuzón.
Cat- jajaja ¿En serio?
W- Pues claro
Cat- Pues no estoy preparada… tengo que ponerme el bikini. Espera.
Entré en un pequeño camarote con mi bolso para ponerme el bikini, me quité la camiseta y me bajé lenta y sensualmente la falda, me sentía observada, aunque la verdad no lo estaba. Lo doblé todo y lo coloqué sobre una mesa que había, introducí una mano en el bolso con la que investigué todo lo que había en su interior tratando de buscar el bikini. No lo encontré. Así que vacié el bolso sobre la mesa, una toalla, un cepillo para el pelo, un pequeño espejo de bolsillo, un estuche con pinturas, mi BBy un tampax.
Estaba en sujetador y braguitas, pero para ser sincera me veía bastante sexi, mejor que nunca, radiante. No sé si porque Will me hacia sentir así cuando estaba conmigo o porque realmente iba así, fantástica. Fuese por lo que fuese esa noche iba dispuesta a triunfar, a estallar de felicidad.
Cogí el bikini con una mano, y al elevarlo unos centímetros en el aire algo se calló, lo miré. Era como el envoltorio de una pastilla, me acerqué, lo seguí mirando y me di cuenta de lo que realmente era, un preservativo.
Yo no lo había puesto ahí, porque ni si quiera había comprado uno en la vida. Las ganas de pasarlo bien se me quitaron, se me cruzaron las ideas, ahora ya no tenía nada claro. En ese instante Will me llamó, consiguió sacarme de mis pensamientos, cogí el preservativo y en braguitas y sujetador me acerqué a él. Llevaba el condón en la mano.
¿Will?-le pregunté.
W- Ya estas lista?
Cat- No, aun no.
W- ¿Y entonces?- preguntó mientras se giraba.
Supongo que al verme en ropa interior y con eso en la mano lo malinterpretó todo.
W- Catri ¿ qué haces con eso en la mano? Aun es pronto…, no hemos venido a eso…- intento excusarse.
Cat- ¡Ya lo sé! Entonces ¿no has sido tú?
W-   ¿Yo que?
Cat- ¿No has sido tú el que lo ha puesto en mi bolso?
W- ¿Yo? Catrina nunca haría eso… no soy ese…
Cat- Si ya lo sé, pero ¿entonces?
W- No lo sé, pero yo no.
Cat- Mi madre, ha sido ella…
W- Ves! Problema resuelto- dijo mientras sonreía.
Cat-Ni mucho menos, que vergüenza…
Will rió -No pasa nada, tranquila.
En ese instante Will me cogió en sus brazos, el condón que aun llevaba en la mano se me calló. Noté como su respiración se aceleraba.
Cat- ¡Will Para! ¿Que haces?
No me dio tiempo a responder nada ya que Will me cogió de la mano y me zambulló en el agua junto a él.
Cat- ¡Imbécil!- dije enfadada.
W- ¡Guapa!
Cat- No vas a hacer que te perdone. Estoy enfadada.- dije esta vez tranquila, de nuevo.
W- ¿A no?
Cat: No.
Entonces empezó a perseguirme,a besarme, mas apasionadamente que nunca, en el agua, nadando, coordinándonos para mantenernos a flote. Besos, caricias, susurros…no dejábamos de besarnos, aprovechábamos cualquier ocasión oportuna, por bueno, así es la vida a los quince, no se desperdicia ni un minuto de felicidad.
Corté el beso.
W- ¿Qué pasa?
Cat- ¿No has sido tú?
W- ¿qué? ¿qué pasa?
En ese momento lo volví a notar, otro roce, más brusco que el anterior…
Cat- ¡Eso! Ahora mismo! Deja de rozarme las piernas, me haces daño Will.
W- ¿Que?- dijo con la cara blanca, preocupado, asustado.
Cat- ¿Will qué pasa? ¿No eres tú?- le pregunte totalmente asustada.
W-Si, claro que soy yo… pero no volveré a rozarte…- dijo aun preocupado.
Cat- ¿Como que no? Lo has vuelto a hacer
W- Vamos Catri al barco, vamos, ¡YA!- me dijo gritándome al final.
Nunca había visto a Will de ese modo, me asusto su carácter, no sabía lo que le pasaba.
W- Catrina que salgas, vamos , vamos ,monta en el barco, ¿Es que no me escuchas?- gritó enfadado.
Me quedé mirando sus ojos, su cara, a él, el chico más dulce que conocía, ahora de esa forma…
W- ¡Catrina! No te quedes ahí parada, ¡que te muevas!
Se me calló el mundo encima, las ilusiones las ganas de ser feliz a su lado. Las apariencias me engañaron, ¿dónde me había metido?. Pero no, en este momento no me iba a empequeñecer y por primera vez le grité:
¿Qué coño te pasa eh? ¿Por qué me gritas? ¿ Qué te crees que soy?
W- Catrina por favor, sal del agua, hazlo por mi.
Su forma de ser, la manera tan rápida de aprender, de ver que no estaba haciendo las cosas en el tono adecuado, no sé por qué pero le hice caso, lo hice por él, empecé a subir las escaleras del barco.
Cat- Will ¿que haces? Sube.- le pregunte casi gritando.
W- Llamar la atención- respondió muy seguro de sí mismo.
Cat- ¿la atención de qué? Deja de chapotear y ven.
No hubo respuesta... entonces lo comprendí, todo mi cerebro se concentró en buscar alguna hipótesis. Algo había hay debajo, algo peligroso. Y no pensaba dejar a Will solo en esto. Si el reía yo reía, si el lloraba yo lloraba, si él lo pasaba mal, yo lo pasaba mal…
Me volví a zambullir en el mar.
W- Catrina, he dicho que te salgas.
Cat- ¿Es que no te das cuenta del peligro?- le dije mientras me acercaba hacia él.
Cat- Muévete tu también!
Le cogí la mano, apreté todas mis fuerzas y tiré de él intentando sacarlo del trozo de mar. Quizás lo estaba haciendo mal, y no era el modo de escapar, pero era lo único que podía hacer.
W- Catrina- me dijo impotente- No puedo mover el pie, me duele muchísimo.
Cat- Haz un esfuerzo por favor.
Entre los dos conseguimos llegar a las escaleras. El subió con un pie, apenas podía.
W- Vamos Will, es fácil. Puedes hacerlo -
Le empujé sacando fuerza de donde no tenia y al final caímos a cubierta. Yo encima de él.
Respirábamos aceleradamente por el susto, el esfuerzo, la adrenalina…
W- ¿Sabes que hay muchas especies marinas peligrosas en Australia?
Rompí a reír. Sorbí la nariz y me sequé las lágrimas. Había pasado mucho miedo.
Cat- ¿ Qué me cuentas ahora tonto?
W- ¡Ay! Catri, me aplastas.
Cat- Lo siento- me quité rápidamente y me senté a su lado.
Cat- ¿Qué tal tu pie?
W-Ah…. me duele. Me ha hecho bastante daño.
Cat- Bueno, ten, sécate- le extendí unas toallas que habíamos sacado antes y nos secamos.
Cat- Ahora deberíamos ir al médico- me incorporé, Will me sujetó.
W- No, si estoy bien. No quiero estropear esta noche. Ha sido un golpe, mañana estaré bien.
Entonces apoyé mi cabeza en su pecho, liso, musculoso, suave, Ya más cómoda le miré a la cara y sonreí.
El susto había pasado.
Nos tendimos en la cubierta, mirando el mar, las estrellas, el me miraba a mí, luego yo a él. Me esquivaba la mirada jugueteando. Después intentaba besarme pero yo le huía. Le mordí la cara. Choco su nariz con la mía. Me acariciaba el pelo. Le sonreí. Me besó, me dejé. El se tendió totalmente. Giré media vuelta y nuestros labios se rozaron, una vez más…
Miré a mi derecha, el condón. Pensamientos. Will ya estaba dormido. Cansado. Me levante sin hacer ruido, de puntillas llegué hasta mi móvil; (Mamá duermo en casa de Kate, la chica que conocí en la playa el primer día, te quiero. SMS ENVIADO.)
Volví a cubierta .Lo miré. Me acomodé a su lado y le di un beso de buenas noches.

Esa noche tuvimos suerte, no volvimos a pasarlo mal, y al fin y al cabo terminó siendo especial, fue nuestra primera noche juntos, la primera pero no la última. 

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